El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, iniciado en marzo de 2025 en el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro, Buenos Aires, ha revelado detalles críticos sobre las decisiones médicas que podrían haber contribuido a su fallecimiento el 25 de noviembre de 2020. A continuación, se resumen los puntos clave basados en la información disponible:
- Internación domiciliaria inadecuada: Tras una cirugía craneal por un hematoma subdural en la Clínica Olivos, Maradona fue trasladado a una casa en el barrio privado San Andrés, Tigre, para su recuperación. Testimonios, como el de Fernando Villarejo, jefe de terapia intensiva de la clínica, indican que se recomendó una internación en un centro de rehabilitación especializado, pero esta opción fue rechazada por el equipo médico liderado por el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov, en acuerdo con la familia. La casa carecía de equipamiento médico adecuado, como desfibriladores, y no cumplía con las condiciones para tratar a un paciente con las complejidades de Maradona, quien padecía problemas cardíacos, adicción al alcohol y un cuadro de abstinencia.
- Decisiones médicas cuestionables:
- Cirugía sin estudios previos: Villarejo declaró que Maradona fue operado sin los estudios de riesgo quirúrgico necesarios, aumentando los peligros de la intervención.
- Sedación inapropiada: Luque y Cosachov solicitaron sedar a Maradona durante 24 horas en la clínica para controlar su comportamiento, a pesar de la oposición de Villarejo, quien consideró que la clínica no era el lugar adecuado para un tratamiento de desintoxicación prolongado. Esta sedación se realizó en contra de criterios médicos estándares.
- Falsificación de informes: Se reveló que Luque no realizó la cirugía craneal, aunque su nombre aparece en el informe médico. Además, Cosachov fue acusada de falsificar un certificado que afirmaba que Maradona estaba “orientado y lúcido” sin haberlo examinado.
- Negligencia en el monitoreo:
- El médico Pedro Di Spagna, encargado de supervisar la internación domiciliaria, visitó a Maradona solo dos veces en dos semanas y no aseguró la realización de estudios solicitados.
- El enfermero Ricardo Almirón reportó que Maradona estaba en “buena forma” el día de su muerte, a pesar de que la autopsia indicó que agonizó durante 12 horas por un edema agudo de pulmón e insuficiencia cardíaca. Almirón afirmó que Maradona no le permitió entrar a su habitación, limitando su capacidad de monitoreo.
- Nancy Forlini, coordinadora de Swiss Medical, y Mariano Perroni, coordinador de enfermeros, fueron acusados de no organizar adecuadamente los cuidados domiciliarios, delegando responsabilidades a los médicos principales.
- Abandono y desamparo: La fiscalía, liderada por Patricio Ferrari, argumenta que Maradona fue dejado en una “situación de desamparo” y “librado a su suerte”. Los fiscales sostienen que el equipo médico actuó de manera “deficiente, temeraria e indiferente”, incumpliendo sus deberes a pesar de conocer los riesgos. Una junta médica de 21 expertos concluyó que Maradona podría haber sobrevivido con atención adecuada.
- Testimonios impactantes:
- Colin Campbell Irigoyen, un médico vecino que intentó reanimar a Maradona, testificó que el exfutbolista llevaba muerto al menos dos horas cuando llegó, presentando signos de rigidez cadavérica.
- El oficial de policía Lucas Farías señaló la ausencia de material sanitario en la habitación, reforzando la precariedad de la internación domiciliaria.
- Acusaciones y contexto emocional: Los siete imputados (Leopoldo Luque, Agustina Cosachov, Carlos Díaz, Nancy Forlini, Mariano Perroni, Ricardo Almirón y Pedro Di Spagna) enfrentan cargos por homicidio simple con dolo eventual, con penas de 8 a 25 años. La enfermera Gisella Madrid será juzgada por separado en un juicio por jurados. La fiscalía y la querella, representada por el abogado Fernando Burlando, calificaron la internación como un “plan inhumano” que condenó a Maradona a muerte, destacando que en un hospital “le hubieran salvado la vida”.
Conclusión: El juicio ha expuesto una serie de decisiones médicas negligentes, desde la falta de estudios preoperatorios hasta la elección de una internación domiciliaria sin las condiciones necesarias, pasando por un monitoreo deficiente y la falsificación de documentos. Estas acciones, según la fiscalía, llevaron a la muerte evitable de Maradona, quien no estaba en condiciones de tomar decisiones sobre su salud. El proceso, que se extenderá al menos hasta julio de 2025, sigue generando conmoción en Argentina y el mundo, con más de 100 testigos aún por declarar.
